La redacción es clara y la conclusión, que no se discutió en esta reseña pero que consiste en un breve análisis de la justiciabilidad de los DESC en México (país de origen del texto), es pertinente frente al análisis planteado. Sin embargo, considero que a la autora le faltó, como a muchos de nosotros nos suele faltar con más frecuencia de la que debería, dar un paso atrás y mirar desde una perspectiva mucho más completa aquello que decidió estudiar. El análisis de Martínez se queda un poco corto por varias razones que obedecen a una falta de perspectiva tanto histórica como regional. En primer lugar, la autora solo considera las dos posiciones clásicas y casi irreconciliables que se han dado dentro del debate, y no integra en su análisis los diferentes puntos medios a los que ya se ha llegado (entre ellos, el propuesto por la Corte Constitucional colombiana) para resolver esta discusión. Lo anterior hace que su texto quede un poco atrás frente a las posiciones más actuales del debate desarrolladas por tribunales constitucionales que, en su día a día, lidian con esos problemas. En segundo lugar, la argumentación de la autora habría podido ser mucho más rica si dentro de ella se hubiera incluido, de manera muy breve, un trasfondo histórico de la discusión1. Estos son solo dos ejemplos sobre cómo la autora habría podido enriquecer su posición.